Tres rutas imprescindibles por las Rías Baixas: Bienvenido a Galifornia

El paraíso está muy cerca

Puesta de sol desde la playa de Portomaior, Bueu (Pontevedra).
0

Son muchas las personas que me preguntan por rutas para recorrer las Rías Baixas y Pontevedra, qué ver, dónde parar, cómo organizarlo y algún sitio para comer. Tengo la suerte de proceder de un lugar espectacular, de una provincia completísima que puede ser el lugar perfecto para tus vacaciones. O así lo piensa cada vez más gente.

El destino Rías Baixas, que alude a toda la costa de la provincia de Pontevedra, es el séptimo destino turístico a nivel nacional. En él encontrarás algunas de las playas más famosas de España, islas increíbles, ciudades y pueblos encantadores, rincones sorprendentes, paisajes de leyenda y, cómo no, la gastronomía. Porque la gastronomía gallega es la mejor de España, sin lugar a dudas. Ningún lugar como Galicia concentra tanta variedad de producto con tanta calidad.

Todo eso a precios razonables, distancias amables, una presión turística controlada (por el momento), buena gente y buen clima. Porque en las Rías Baixas hace buen tiempo en verano y por ello estamos algo hartos de los tópicos respecto a la climatología.

Y sí, un viaje de rutas por las Rías Baixas son la mejor manera de descubrirlas en profundidad y entender por qué Galifornia está de moda. Además de las rutas y las playas, como os cuento en otro artículo de este blog, hay muchas actividades para hacer en las Rías Baixas.

Viaje a las Rías Baixas

Un viaje por las Rías Baixas, o Rías Bajas, puede ofrecer muchas alternativas. Podemos optar por quedarnos en algún pueblo, en una aldea del rural, en una zona turística, en una de las sus ciudades (Pontevedra o Vigo) o incluso en una isla, A Illa de Arousa, único municipio insular de Galicia, que vive conectado con el continente gracias a un puente.

Para nuestras tres rutas por las Rías Baixas, estableceremos la capital provincial, Pontevedra, como eje de operaciones. ¿Por qué? Primero, está en la costa y en el centro de la provincia, por lo que las distancias son perfectas en todas las direcciones para hacer viajes cortos. Segundo, porque es una ciudad pequeña, peatonal, agradable y con mucho ambiente para ser una buena base de un viaje por el sur de Galicia. Y tercero, porque la denominada gran desconocida de Galicia. Tenemos la mala (o buena) fortuna de que mucha gente no pare aquí. ¡Ellos se lo pierden!

Para un viaje por las Rías Baixas lo ideal es tener un coche. El transporte público en Galicia no es del todo bueno y un coche nos permitirá recorrer muchos más rincones.

Las tres mejores rutas por las Rías Baixas

Ruta por la península del Salnés

Quizás no te suene la península del Salnés, pero sí Cambados, Vilagarcía, O Grove, A Toxa y cómo no, Sanxenxo. El Salnés es el territorio que engloba todos estos lugares, la tierra del vino albariño, del marisco, ese trozo de tierra que se encuentra entre las rías de Arousa y Pontevedra.

Una ruta por el Salnés combina el ajetreo y turismo clásico de Sanxenxo -la Marbella gallega- con la tranquilidad de parajes como A Illa de Arousa o las playas de Poio. Lugares todos ellos de hermosa factura y con muchísimas posibilidades.

Mapa de ruta: 110 kilómetros

Una excursión perfecta para un día, recorriendo clásicos de la costa gallega. Una ruta perfecta que aúna playas, patrimonio y la mejor gastronomía, la de la ría de Arousa, la más productiva de todas las rías gallegas.

09:30. Pontevedra: Nuestro punto de partida. Arrancamos hacia el norte, por la autopista AP-9 para luego coger la AG-41 y la VG-4.3. A nuestro alrededor, miles de viñedos, demostración de que nos encontramos en el corazón de la Denominación de Origen Rías Baixas, en la subzona del Salnés. La presencia de muchas bodegas en el camino dan fe de ello.

Tierras de Valle-Inclán y del vino albariño

10:00. Casa-Museo de Valle Inclán (Vilanova de Arousa). Uno de los grandes dramaturgos de la literatura española. Podrás visitar este espacio dedicado al escritor en su pueblo natal, Vilanova de Arousa. Un pequeño rincón del autor de clásicos como Tirano Banderas o Luces de Bohemia conocido por todos.

De Vilanova en apenas unos 10 minutos cruzaremos el puente que nos conduce a A Illa de Arousa.

11:30. A Illa de Arousa. Esta isla es un magnífico lugar de vacaciones. Alejado del mundanal ruido, es perfecto para disfrutar de playas tranquilas, caminatas y una sucesión de tabernitas donde comer pescado, mariscos y el famoso pulpo de A Illa, que nada tiene que ver con el pulpo á feira. Pon pies en polvorosa y acércate hasta el faro de Punta Cabalo, donde ahora hay un pequeño restaurante, y date un baño mañanero en las playas del parque natural de Punta Carreirón, al sur de la isla.

Cambados. La capital del vino albariño. De no comer en A Illa de Arousa, siempre podrás hacerlo en Cambados, dando buena cuenta de las bodegas y tabernas que ofrecen el afamado vino blanco. Fue elegida Ciudad Europea del Vino en 2017 y cuenta con Parador de Turismo y su famoso conjunto monumental de la plaza de Fefiñáns.

A Toxa, Sanxenxo y Combarro: tres iconos turísticos

16:30. O Grove e isla de A Toxa. Dos lugares que suenan a todo el mundo. O Grove, por su Fiesta del Marisco, uno de los principales eventos gastronómicos de Galicia, y el Náutico de San Vicente, enclave musical del verano gallego. Y A Toxa, por el glamour de finales del siglo XIX, su gran hotel, su balneario, su casino, su campo de golf pegado al mar y, cómo no, su famosa marca de jabones.

A Toxa es la otra isla gallega conectada con tierra firme mediante un puente. Todo empezó gracias a un burro, que descubrió las propiedades de las aguas medicinales. Hoy es uno de los hoteles-balnearios de cinco estrellas más famosos de España por el que pasaron Henry Kissinger, Rockefeller, García Márquez o los Reyes de España. Merece la pena explorarla.

Sal de O Grove y para en la playa de La Lanzada, una de las más famosas de Galicia. De ahí, continúa la carretera de la costa hacia Sanxenxo (no lo hagas por el interior). Una bella línea costera salpicada por agradables playas.

18:30. Sanxenxo. La Marbella gallega, la capital turística de Galicia. No deja indiferente a nadie, con incondicionales de cada verano y detractores que huyen de su masificación. Pasa de apenas 15.000 habitantes censados a más de 120.000 habitantes en verano, conviertiéndose en la tercera ciudad de Galicia. La noche es su otra arma: todos los jóvenes gallegos hemos salido alguna vez por Sanxenxo o la vecina Portonovo.

20:00. Combarro. El pueblo de los hórreos mirando al mar, uno de los rincones más encantadores y conocidos de Galicia. Perderse por sus callejuelas es indispensable. Como también lo es adentrarnos en alguna de las tabernas y restaurantes que se esconden entre piedra y piedra.

Y desde Combarro, en apenas 15 minutos, llegaremos a Pontevedra.

Playas en el Salnés

Sanxenxo es el municipio de España con mayor número de playas con bandera azul, sin duda su mejor patrimonio. Silgar es su famosa playa urbana, mientras que La Lanzada es una de las más conocidas de Galicia (compartida con el vecino ayuntamiento de O Grove). Con su capilla, su castro, sus casi tres kilómetros de longitud y su leyenda de tener un don para la fertilidad, una visita obligada en un verano por las Rías Baixas.

Pero como Sanxenxo es sinónimo de playa, tienes muchas otras donde elegir, alejadas del casco urbano como Areas, Major y Montalvo, o pequeñas calas como Pampaido, Area de Agra…

A Illa de Arousa, por su carácter insular, esconde rincones veraniegos difíciles de encontrar en otros lugares. Tanto la abrigada playa de Area da Secada, en Punta Cabalo, por sus aguas turquesas, como la playa de Gradín o las pequeñas calas del Espacio Natural de Punta Carreirón, son arenales excepcionales.

illa de arousa
Playa en Punta Carreirón (Illa de Arousa).

Dónde comer en el Salnés

La ría de Arousa es la más productiva de Galicia, en especial por el mejillón. De Galicia sale el 40% del mejillón que se comercializa en Europa. Aquí comer bien está garantizado en casi cualquier sitio.

Si quieres el típico bar-restaurante familiar, tan común en Galicia, sigue estas recomendaciones:

  • A Meca (Illa de Arousa): para probar el pulpo estilo Illa, además del resto de mariscos del día.
  • Restaurante Tropezón (Cambados): famoso por su merluza.
  • A Nova Cepa (Poio): un desconocido rincón cuya especialidad son las zamburiñas, aunque también puedes encargar una mariscada por un módico precio.

Claro que si te quieres vivir una experiencia gastro, en esta zona se concentran hasta cuatro restaurantes con estrella Michelin, todos ellos símbolos de la nueva cocina gallega:

  • Casa Solla (Poio)
  • Pepe Vieira – Camiño da Serpe (Poio)
  • Yayo Daporta (Cambados)
  • Culler de Pau (O Grove)

Ruta por el sur de Pontevedra y norte de Portugal

Ahora que ya has explorado la mitad norte de la costa de Pontevedra, toca hacerlo con la parte más meridional. Estamos muy cerca de Portugal, y eso ha proporcionado al sur de la provincia de una serie de hitos históricos que te sorprenderán.

En esta ruta obviaremos Vigo. Como comentamos al principio de este artículo, puedes elegir tanto Vigo como Pontevedra como base, ya que entre las dos ciudades apenas distan 25 kilómetros de distancia, unos 20 minutos por autopista.

Mapa de ruta: 180 kilómetros

Un completo recorrido por el sur de la provincia e incluso penetrando en el norte de Portugal. Una visión un tanto diferente respecto a la ruta anterior por el Salnés.

Ruta de castillos y fortalezas

Quizás no lo sepas, pero Galicia tiene también muchos castillos. De hecho, el sur de la comunidad está plagado de ellos. Un verdadero territorio de señores y batallas.

09:30. Partimos de Pontevedra por la autopista AP-9 rumbo al sur, en dirección Vigo y O Porriño. El objetivo es enfilar hacia la N-120.

10:30. Tras una hora de viaje, llegamos a Mondariz, balneario emblemático de Europa en el siglo XIX. Un balneario diseñado por Antonio Palacios y fundado en 1873, que alojó a ilustres huéspedes en una especie de Belle Époque a la gallega, cuando Mondariz rivalizaba con Baden-Baden o Bath. De hecho, el balneario era tan poderoso que se convirtió en municipio independiente (Mondariz-Balneario) en 1094, siendo el ayuntamiento más pequeño de España.

11:00. Castillo de Sobroso. Es, junto al cercano castillo de Soutomaior, uno de los castillos más famosos de Galicia. Testigo de luchas de caballeros que dominaban el noroeste de la Península, se sabe de él desde tiempos de doña Urraca (siglo XII). Puedes visitarlo y subir a la terraza de la torre del homenaje, desde donde se divisa hasta la frontera con Portugal.

Desde Sobroso, en apenas 30 minutos llegaremos a Tui, nuestro lado de la frontera hispano-portuguesa que delimita el padre de los ríos gallegos, el río Miño. Tui es una de las viejas capitales de Galicia, cuyo símbolo es su catedral-fortaleza.

13:00. En Tui cruzamos su famoso y viejo puente de hierro de estilo eiffeliano y doble plataforma para tren y vehículos. Alcanzamos Valença do Minho, un encantador pueblo famoso por su fortaleza de los siglos XII a XVIII, con cinco kilómetros de murallas y en perfecto estado de conservación. ¿Caerás en la tentación de comprar toallas o sábanas, como la mayoría de visitantes? Estamos en territorio bélico, dos orillas de un río enfrentadas y siempre bien defendidas.

tui pontevedra
Vista de Tui y el río Miño, desde Valença do Minho.

Tras callejear por Valença, volvemos a territorio español para seguir por la ribera del Miño hacia su desembocadura. El curso del río nos sirve de guía hacia el mar. Recorremos otra de las subzonas de la Denominación de Origen Rías Baixas, la subzona de O Rosal. Aquí hay grandes bodegas de albariño como Terras Gauda o Santiago Ruiz.

Mirando a América

14:30. A Guarda y el Monte de Santa Tecla o Santa Trega. La punta suroccidental de Galicia. A Guarda es el lugar perfecto para comer en nuestra excursión, capital del pez espada y de la langosta. Y tras la comilona, subir al Monte de Santa Tecla (o Santa Trega), una cima de 340 metros donde se encuentra el castro más visitado de Galicia, Monumento Nacional desde 1931. El castro de Santa Tecla es un poblado castreño-romano de los siglos I a.C. y I d.C donde vivían más de 3.000 personas.

Además del valor histórico del castro, el lugar merece la pena por las vistas. Una vertiginosa atalaya sobre el Atlántico que mira a Portugal. Imprescindible en cualquier viaje por Galicia.

castro santa tecla
El castro de Santa Tecla, el más visitado de Galicia.

17:30. La costa de Oia. Remontamos la costa hacia el norte por una preciosa ruta que nos llevará hasta Baiona. De camino, Oia, con su monasterio bañado por las aguas del Atlántico. Aquí las playas escasean y nos encontramos ante una costa rocosa, ventosa y que sobrevive a la intervención del hombre. Más adelante alcanzamos el cabo Silleiro, con su famoso faro y la gran batería militar que todavía conserva sus cañones. Ante ti, una de las mejores vistas de las islas Cíes, muy recomendable al atardecer.

18:30. Baiona, la primera villa que conoció la noticia del Descubrimiento de América. Sus monumentos y su callejero la delatan. En el puerto, una réplica de la carabela Pinta. Junto a él, el símbolo de Baiona: el castillo de Monterreal, hoy Parador Nacional. Una pequeña península fortificada, asediada por piratas y asaltada en 1585 por Francis Drake. Aprovecha para recorrer sus muros y tomar algo en el Parador. ¡Un enclave mágico!

Cae la noche y el atardecer en Baiona, con las Cíes de fondo, es de auténtica postal. Termina así esta excursión por el sur de Pontevedra.

Playas de frontera

Baiona es, junto a Sanxenxo, el otro destino veraniego de Galicia. Una villa marinera con muchísimo ambiente. Así que este en este entorno encontrarás muchas y grandes playas. Playa América o Panxón son las más simbólicas.

Pero ya que estamos rondando la frontera, otra idea puede ser probar las playas de la desembocadura del Miño, tanto en España como en Portugal. Del lado español, en A Guarda, en la misma esquina donde termina Galicia y el río se hace mar, encontrarás la playa de Camposancos.

Enfrente de Camposancos, la Foz do Minho: una curiosa punta con 270 grados de arena donde convergen Miño y el Atlántico. Para llegar, coge la carretera N-13 desde Valença hasta llegar a Caminha. O bien, si estás en A Guarda, puedes coger el ferry que cruza el estuario del Miño. Estás en un lugar de incomparable belleza.

Dónde comer: A Guarda y Valença

Como cualquier otra zona de la comunidad, esta esquina de Galicia ofrece numerosas alternativas para disfrutar de la mejor gastronomía.

Mi primera recomendación es comer en A Guarda, para mi gusto uno de los pueblos donde mejor se come en el sur de Galicia. En A Guarda se celebra la fiesta del pez espada y de la langosta. Algunas referencias son los restaurantes Bitadorna o Gaviota, todos en la zona del puerto.

¿Y qué tal cruzar la frontera para probar el clásico arroz de mariscos de nuestros vecinos? En Valença do Minho encontrarás muchas opciones a precios muy parecidos a los nuestros. Anota unos nombres para comer dentro de la fortaleza: Bom Jesus, Baluarte, Fortaleza…

Ruta por la Península del Morrazo

Hemos estado en la parte norte de la costa pontevedresa (Salnés); luego hemos visitado la costa más meridional (A Guarda, Baiona); ahora sólo nos queda el centro, el trozo que divide las rías de Pontevedra y Vigo. Es la Península del Morrazo.

No tiene a Sanxenxo o a Baiona, lo que significa que en esta península encontrarás mucha tranquilidad. El Morrazo lo conforman cuatro ayuntamientos: Marín, Bueu, Cangas do Morrazo, Moaña y Vilaboa. Los dos primeros miran a la ría de Pontevedra, los otros tres a la de Vigo.

Será una ruta más corta para parar más en las playas, los chiringuitos y alguna que otra pequeña visita.

Mapa de ruta: 75 kilómetros


10:00. Salimos de Pontevedra hacia la vecina localidad de Marín a escasos cinco kilómetros, sede de la Escuela Naval Militar y de un importante puerto. A lo largo de la costa de Marín se despliegan varias playas, algunas de ellas muy recónditas, pequeñas y tranquilas calas enclavadas entre pequeños bosques. La primera de ellas es Portocelo y la siguiente es Mogor, donde podremos visitar los petroglifos de Mogor, de los años 3.000 a 2.000 a.C. El entorno de Pontevedra es muy rico en yacimientos prehistóricos de este estilo.

Seguimos la costa y las playas se suceden a nuestro lado derecho: Aguete, Loira, Lapamán, Portomaior, Agrelo… Casi todas de bandera azul y una calidad altísima. Tras llegar a Bueu, continuamos por el interior para cruzar la península con dirección a Cangas do Morrazo, ya en la ría de Vigo.

11:30. Cangas. Villa marinera por antonomasia, es el vigía de un Vigo que se ve inmenso desde este lado de la ría. Es también uno de los puertos de donde parten los barcos a las Islas Cíes, el gran paraíso gallego.

Desde Cangas nos dirigimos por la costa hacia el extremo de la península del Morrazo. Tras atravesar las parroquias de Hío y Limens, llegamos a la escarpada Costa de la Vela, que en una espectacular travesía nos conducirá a un lugar mágico: el cabo Home.

cabo home
Las Islas Cíes, desde la Costa de la Vela y el cabo Home.

No verás las Islas Cíes más cerca que desde cabo Home. A tu alrededor, otras dos playas que vigilan la entrada de la vecina ría de Vigo, Melide y Barra. Estamos dando la vuelta a la península, por ello nuestra mirada cambia de aguas. También, muy cerca del cabo Home, se encuentra el monte do Facho, donde podrás disfrutar de otra gran perspectiva de las islas Cíes y Ons.

La tranquilidad de O Morrazo

Podremos comer en el entorno de O Facho o la tranquila villa de Aldán, un recogido núcleo cuna de muchos piragüistas olímpicos, entre ellos David Cal. Aldán es un escondite de la costa, una ría que surge dentro de la ría, un pequeño paraíso sin explotar que sobrevive alejado del gran turismo. Aquí encontrarás algunas de las mejores calas de la ría donde pasar la tarde.

20:00. Desde Aldán empezamos nuestro regreso a Pontevedra por la costa, para pasar por el pueblo marinero de Bueu.

Al atardecer (recuerda que en verano anochece muy tarde en Galicia), paramos en la playa de Lapamán para disfrutar de una de las mejores puestas de sol de las Rías Baixas. El sol se pone enfrente nuestro y se esconde tras la isla de Ons. La playa de Lapamán es una joya de arena blanca y fina escondida tras los árboles con la vigilancia del islote del Santo, al que se puede acceder caminando con la marea baja.

Playas en O Morrazo

Sin duda, la península del Morrazo es un enclave perfecto para disfrutar de playas paradisíacas y no tan masificadas como en otras zonas de las Rías Baixas. Tanto las playas de la orilla de la ría de Pontevedra, como las de la orilla de la ría de Vigo, tienen en común un plus de tranquilidad con la garantía de buen tiempo, difícil de encontrar en otros lugares.

De tener que escoger, hay varias playas emblema:

  • Lapamán, por su arena fina, su islote, su carácter recóndito y su chiringuito donde cenar delante de una perfecta puesta de sol.
  • Barra y Melide, por su ubicación en un lugar mágico como cabo Home, con las Cíes enfrente.
  • Aldán: Castiñeira y Menduiña, dos emblemas de la zona.

Dónde comer en O Morrazo

Marín, Bueu, Aldán, Cangas… Cualquier lugar es bueno para comer bien en la península del Morrazo. Pero, si tenemos que elegir, estas serían algunas recomendaciones:

  • Chouzo (Bueu). Un popular restaurante familiar donde puedes probar buenos pescados.
  • A Centoleira (Beluso, Bueu). Un clásico con más de 125 años de historia especializado en marisco.
  • O Con de Aldán (Aldán). Sobre el mar, en plena bahía de Aldán y con una espléndida terraza. Merece la pena coger mesa fuera.
  • Bar Umia (Marín). Una taberna de las de antaño, donde probar unos buenísimos calamares y vino de barril.
  • Lino (playa de Lapamán, Bueu-Marín). Un chiringuito histórico con los mejores calamares fritos de las Rías Baixas.
playa de lapaman
La playa de Lapamán, entre Marín y Bueu.

Las Rías Baixas son un perfecto destino para tus vacaciones. En verano el buen tiempo está casi garantizado, salvo alguna semana de tregua que tampoco viene mal. Las Rías Baixas tienen un microclima que las diferencia del resto de Galicia, por eso verás alguna que otra diferencia en los mapas del tiempo.

Pero la costa pontevedresa también es un buen destino para el resto del año. Estas tres rutas son perfectas para conocerlas en tres días, palmo a palmo y sin prisa. Aunque, si de verdad quieres conocer las Rías Baixas, te faltarán días. Así que vete reservando al menos una semana…

Enlaces útiles sobre las Rías Baixas

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.